Liposucción asistida mecánicamente – PAL
En este tipo de liposucción se utiliza una cánula que tiene un movimiento rápido hacia adelante y hacia atrás. Esta vibración permite extraer grasa dura de forma más fácil y rápida.La liposucción asistida mecánicamente puede causar menos dolor e hinchazón y permite que el cirujano extraiga la grasa con mayor precisión. Esta técnica es elegida cuando es necesario extraer grandes volúmenes de grasa o si el paciente ha tenido un procedimiento de liposucción anterior.
LÁSER Liposucción asistida por láser – LAL
Esta técnica utiliza luz láser de alta intensidad para romper la grasa y así extraerla. Durante la liposucción, se inserta una fibra láser por medio de una pequeña incisión en la piel que emulsiona los depósitos de grasa. Luego, se lipoaspira a través de una cánula modelando así, el contorno corporal.
VASER Liposucción asistida por ultrasonido – UAL
Esta tecnología se usa a veces junto con la liposucción tradicional. Se inserta una varilla metálica que emite energía ultrasónica debajo de la piel, rompiendo las paredes de las células de grasa para extraerlas con mayor facilidad. Una nueva generación de liposucción asistida por ultrasonido, llamada liposucción VASER, utiliza un dispositivo que puede mejorar el contorno de la piel y reducir la posibilidad de lesiones en ella.

La liposucción es muy bien tolerada y no es un procedimiento doloroso. Los pacientes pueden experimentar algunas sensaciones de entumecimiento o de cansancio muscular que calma con analgésicos comunes. También puede notar la pérdida transitoria de la sensibilidad en la piel de la zona operada, que recuperará gradualmente.

La liposucción puede realizarse en todas las zonas donde hay exceso de grasa. Las más comunes son el abdomen, cintura, caderas y muslos, pero también es posible en papada, brazos, espalda, tobillos.

La intervención suele durar normalmente entre una y dos horas. Dependiendo de la cantidad de zonas y el volumen de grasa a eliminar.

Son diferentes formas de describir una misma cirugía. El principio sigue siendo el mismo que es remover la grasa localizada con una cánula para lograr un mejor contorno corporal.

Es recomendable 2 a 3 semanas luego de la cirugía. 

Usa tu faja todo el día y todos los días de las primeras 4 semanas (24x7x4). Solo deberías quitártela para lavarla o bañarse. Después de la cuarta semana Puedes usar la faja por 12 horas al día. Puede ser durante el día o la noche. Asegúrate que la faja no te quede demasiado apretada. Tu faja debe quedar ajustada pero también debes sentirte cómoda, porque la tendrás que usar por todo el día y por varias semanas. El ajuste de la faja debe ser similar al de un vendaje. La faja adecuada no debe dejarte marcas en la piel de las áreas que fueron sometidas a la liposucción. Es importante que las regiones sometidas a la lipo se mantengan ajustadas con la presión de la faja. Busca tu posición más cómoda para descansar (sentada o acostada).

Por lo general, es una cirugía ambulatoria y el paciente puede regresar a su casa unas horas después de la intervención. Usará una faja durante un mes. No se dejan tubos de drenaje. Las heridas son milimétricas y quedan ocultas en pliegues o debajo de la ropa interior. Es normal que aparezcan moretones, inflamación, o que se sienta alguna molestia localizada. El paciente en dos o tres días podrá volver a trabajar y conducir un automóvil. Durante el primer mes no se recomienda actividad física intensa. Es aconsejable hacer masajes de drenaje linfático en las zonas tratadas, con el fin de que la recuperación sea más rápida. Si bien los resultados son notables inmediatamente, para ver el resultado final deberá esperar como mínimo tres meses.

La cirugía remueve las células grasas de las zonas tratadas logrando la forma del cuerpo deseada. Dado que este es un procedimiento para dar forma al cuerpo y no para adelgazar, la silueta lograda con la liposucción se conservará toda la vida, independientemente si el paciente gane o pierda peso. Ahora bien, es necesario cuidar la alimentación y realizar ejercicio físico, ya que aumentos muy grandes de peso podrían causar que las células grasas que todavía permanecen en esas zonas se hagan mucho más grandes, aumentando de nuevo la grasa en las zonas tratadas.

Es prudente esperar más de un año.

La liposucción es sorprendentemente segura. Pueden ocurrir como en cualquier procedimiento quirúrgico lesiones en la piel, alteración temporal de la sensibilidad, moretones, e inflamación. Aunque es posible experimentar irregularidades en la piel después de la liposucción, este efecto es minimizado por medio del uso de micro cánulas. Otros riesgos extremadamente poco frecuentes son la trombosis venosa profunda y la infección porque la anestesia local tumescente actúa como bactericida. Al mismo tiempo, no existe la pérdida significativa de sangre porque la anestesia local tumescente es vasoconstrictora.

El procedimiento más económico puede dar a entender que el cirujano realizará el procedimiento rápido e incompleto. La liposucción es un arte manual. ¿Basarías tu decisión de comprar un óleo por el precio o tomando en cuenta la habilidad del artista? Es más razonable basar tu decisión en la reputación del cirujano, su habilidad, su experiencia y por la capacidad de comunicarse con usted. Unos años después de tu liposucción, probablemente no te acuerdes exactamente el costo de la cirugía, pero vas recordar la calidad de los resultados por el resto de tu vida. El costo de la liposucción no debería ser el factor principal en la elección de tu cirujano.

El costo de la liposucción depende del número de zonas a ser tratadas que demandará un tiempo y esfuerzo determinado para hacer la cirugía.